“Al igual que en otros leñosos el factor mas importante a la hora de realizar una plantación será el conocimiento de todas las variables que intervienen en el futuro desarrollo de nuestros árboles”
Para responder a esta pregunta he intentado abordar los aspectos menos conocidos dentro del proceso de implantación del pistacho, teniendo en cuenta las particularidades que puede tener este leñoso con respecto a otros.
El factor mas importante a la hora de realizar una plantación de pistacho es el conocimiento de todas las variables que intervienen en el desarrollo futuro de nuestros árboles: suelo, clima, orografía, disponibilidad de agua, y otros condicionantes iniciales propios de cada explotación. El error más común que se suele cometer es subestimar este proceso de análisis, lo que puede repercutir directamente en la viabilidad a corto y a largo plazo de la plantación.
Invertir en una nueva plantación no es ninguna broma, por lo que hay que tratarla con bastante rigor y no realizar ninguna acción que no esté completamente justificada. Para ello será de vital importancia un buen asesoramiento, con el fin de nutrirnos del conocimiento de algún experto y de esta manera evitar posibles errores.
En este post vamos a tratar los aspectos más importantes a tener en cuenta a la hora de comenzar a cultivar pistacho: la elección del lugar de plantación, la época y el tipo de planta; la preparación del terreno, el diseño de la plantación y la fertilización de fondo de este codiciado cultivo.
Elección del lugar de plantación
La incidencia de las heladas tardías puede ser un factor de riesgo en el desarrollo del pistachero, para evitar que dañen nuestras plantaciones es conveniente orientar las filas del cultivo hacia el Sur, así como evitar valles u hondonadas.
Conocer el historial de la parcela puede evitar multitud de problemas en el futuro como la presencia de Verticillium u otros patógenos que pueden representar un grave problema en el desarrollo de cualquier plantación. Realizar un análisis previo del suelo nos permitirá comprobar la presencia de alguno de estos patógenos y, además, conocer las características físico-químicas de nuestra parcela.
En algunas ocasiones puede ser aconsejable buscar patrones de pistacho tolerantes a Verticillium, como puede ser UCB-1. Este patrón es posiblemente el más utilizado en plantaciones de regadío, donde este problema puede verse agravado.
“Cualquier cantidad de agua, siempre y cuando esté bien distribuida mejorará el comportamiento del cultivo notablemente frente a un secano”
En el caso de plantaciones de regadío el conocimiento de la cantidad y calidad de agua disponible condicionará gran parte de las acciones futuras. Por ello, al igual que ocurría con el suelo, es indispensable realizar una analítica completa de agua.
Cualquier cantidad de agua, siempre y cuando esté bien distribuida, mejorará el comportamiento del cultivo notablemente frente a una plantación de secano. Aún así, la mayor parte de las plantaciones de pistacho se encuentran en los secanos áridos de la mancha, y aún en esas circunstancias el cultivo ha demostrado una capacidad de producción bastante aceptable tanto en cantidad como en calidad.
Época de plantación y elección del tipo de planta
Se distinguen fundamentalmente dos periodos: Octubre-Noviembre y Febrero-Mayo.
Para plantas en cepellón podemos ser más flexibles a la hora de elegir uno de los dos periodos mencionados, siempre teniendo en cuenta la procedencia de la misma y distinguiendo entre planta injertada y no injertada. Para plantas injertadas, el momento más adecuado serán los meses de menor riesgo de heladas.
En el caso de plantas a raíz desnuda, lo más aconsejable es efectuar la plantación en los meses de reposo vegetativo: Febrero-Marzo.
“La elección, reserva y transporte de la planta es un proceso que debe realizarse con totales garantías por parte del vivero a fin de evitar cualquier imprevisto”
En las épocas en las que la demanda de pistacho es muy elevada suele aumentar el fraude. Esto puede provocar que nuestra planta no posea ni las condiciones sanitarias, ni las características adecuadas (vigor, desarrollo radicular, etc) para su implantación en el terreno.
La edad de la planta también juega un papel importante. Lo más aconsejable es elegirlas de entre 1 y 2 verdores o savias.
Por otro lado, la elección del tipo de patrón y variedad da para un capítulo entero. En este aspecto el mejor consejo que se puede dar es contar con un asesoramiento adecuado y con la experiencia de otros agricultores de la zona. Esto es muy importante, pues el tipo de planta a utilizar nos determinará las acciones a realizar y cuando será el mejor momento para realizar la plantación.
Preparación del terreno y diseño de plantación
La preparación del terreno no difiere con respecto a la que necesitarían otras especies de leñosos.
En cuanto al marco de plantación, la tendencia general es acercarse a marcos de 7×7 tanto en secano como en regadío. Esta disposición se adapta bastante bien a la escasa profundidad de los suelos y a la baja disponibilidad de agua en las zonas de cultivo. En algunos casos, incrementando o disminuyendo esas distancias el cultivo puede verse beneficiado a largo plazo.
Al igual que ocurría a la hora de elegir el tipo de planta, en el diseño correcto de una plantación de pistacho son muchos los aspectos a tener en cuenta: clima, suelo, disponibilidad de agua y nutrientes, tipo de planta… Es aconsejable contar con un asesoramiento técnico que nos permita adecuar nuestra plantación de la mejor manera a nuestras condiciones de partida.
“Una buena preparación del terreno y diseño de plantación adecuadas son fundamentales para obtener producciones rentables que se mantengan en el tiempo”
Fertilización de fondo
Será interesante plantearla cuando la fertilidad del suelo sea muy baja o cuando sea necesaria la corrección de alguno de sus parámetros que pueden influir en el establecimiento del cultivo (pH, salinidad). En cualquiera de estos casos procederíamos a la aplicación de estiércol u otros abonos orgánicos similares en el hoyo de plantación.
En mi opinión, puede ser más efectivo y económico utilizar una solución fertilizante rica en materia orgánica, aminoácidos, fósforo y potasio junto con el riego de implantación. De esta manera cubriremos tanto la demanda inicial de agua como la de nutrientes por parte del cultivo en la misma operación.
Estos son solo algunos de los aspectos que tendríamos que tener en cuenta para iniciar una plantación de pistacho. Sin embargo, este cultivo emergente tiene muchas particularidades, por lo que para cualquier duda o consulta os espero en los comentarios. ¡Cualquier debate generado puede ser de interés para todos nuestros lectores!
Las fotos son cortesía de Servicios Agrícolas Agromariano. Para conocerles y ver más fotos como éstas visita su página de facebook.
